miércoles, 5 de noviembre de 2008

A esa hora en la que el cuerpo pide un poco de tranquilidad.

El que escribe cuando la tarde se hace noche y la luz se vuelve oscuridad, le gusta encontrar un sitio tranquilo donde poder en ordenar sus escasas ideas. De aquel día solamente tengo la imagen que te posteo y el recuerdo de los olores del local. Impresionante le tortilla paisana que se estaba marcando aquella francesita de 60 años y aceptable el olor del té Hornimans que me marque.También recuerdo la conversación que mantuve con un joven viajero que con su bicicleta de supermercado y su flauta como instrumento de financiación recorría España, sin ninguna prisa. La pasta que nos hicimos y el resto de nuestra cena no lo recuerdo(mal síntoma) pero poco importa cuando al día siguiente tuve la posibilidad de vivir otra noche irrepetible.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Jose te veo todo sexy!! y esta vez firmo pa q veas q estoy ligando en serio y todo ajjajajajaj!!

PQ

Anónimo dijo...

ANONIMO sabes que en este blog se te quiere por lo que vales.Un abrazo