El que escribe hoy se ha querido parar a leer un entrañable libro de Miguel Delibes, Mi querida Bicicleta. Pero a medida que leía el libro mis pensamientos se han marchado por otros caminos. Estaba pensando que este libro llegó a mis manos por la amistad con SuperFidel. El libro es bonito pero la dedicatoria me llegó muy dentro.Y mis pensamientos se siguieron marchando por esa misma senda. Me estaba acordando de mi amigo Iñigo, que estos días está saliendo de una delicada operación y que a pesar de no haber dado una pedalada en su vida, mantiene el buen rollo de seguir todos mis post. Seguía pensando que lo importante de este pequeño blog no es el numero de visitas, lo importante es que tú, que lo lees y que tu eres mi amigo y me lo demuestras todos los días con pequeños detalles.
P.D. Iñigo cuidate mucho, SuperFidel sigue luciendo esa bonita sonrisa y tú que me lees sigue recordando que lo mejor de la vida es pedalear rodeado amigos.
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