miércoles, 7 de abril de 2010

El don de la ubicuidad y otras cuestiones de mi blog.





El que escribe se hace mayor y a pesar de todo sigue teniendo muy buena memoria. Corría el 2006 cuando hacia el viaje que he publicado esta pasada Semana Santa. He disfrutado mucho escribiéndolo y recordando pero ya han pasado unos añitos desde entonces.¡Te puedo asegurar que se nota!Pero esta bitácora ha logrado que vosotros me acompañaseis en un tiempo y en un espacio que esta en la pantalla que observáis. La realidad virtual es eso, realidad virtual y por eso se puede estar en varios sitios a la vez y ¡disfrutando! Te aseguro que me siento encantado con haberte “tele transportado” o como se diga, a mi mundo por una semana. Y cuando digo a mi mundo, digo a eso, MI MUNDO porque aunque tu sigas esa ruta será complatamente distinta a lo que te he contado.

Pero en este mi mundo te contare, que mientras viajaba con mi bici por el norte tambien hacia kilómetros con mi coche por el sur del sur. He disfrutado de sus olores, sus sabores y sus gentes .Me he encontrado luz en las personas, frescor en los alimentos y profundidad en sus olores. De la mano de un sexagenario he podido descubrir bonitos lugares y agradables bodegas, pero sobre todo he podido descubrir a un abuelo entrañable, comprometido y con una sabiduría que en pocas personas había visto antes. He encontrado un paraíso al que pienso volver. Incluso creo que por allí andaba Gurb pululando por los pequeños locales con música en directo. Muchas cosas que, sin duda tendré tiempo de comentar en esta bitácora.


P.D. Mi memoria creo que está peor de lo que suponía. El bueno de Manolo me ha hecho caer en la cuenta de un error en mi Camino Primitivo. El tren de regreso a Gijón lo cogí en El Ferrol, no en Vigo como está escrito.


4 comentarios:

CIMAFERMIN dijo...

Buena tierra ,el sur del sur, y buena gente

Anónimo dijo...

Y encima seguro que has venido morenito y todo!!! mientras que por aquí , el sol no se ha asomado ni por casualidad...

Anónimo dijo...

Te recomiendo que vayas a Sevilla para ver la madrugá.
Yo me emocioné al amanecer con los gitanos.
Ahora lo escucho en Onda Cero y me sigue emocionando.

Anónimo dijo...

Ozú pisha! que guenos atardeceres desde el Espiritu Santo con er coto enfrente, a la vera del rio....con un sigarrito!!