El escribe saliendo del paraíso, con una pinta un poco indecorosa, pero al fin y al cabo saliendo de un lugar de ensueño. En mi paraíso había una exuberante naturaleza, la música era muy suave y surgía del contacto del agua con la piedra, la luz era muy clara pero golpeaba con dulzura mi cuerpo. Se escuchaban conversaciones tranquilas de excursionistas que por allí pasaban. Me parecía un sitio grandioso, pero creo que esa sensación ya la habían tenido otros viajeros que por allí pasaron.
Pero mi intención con este post es que tú te detengas por un momento a pensar cuándo y dónde cruzaste por última vez la puerta del paraíso. De paso escucha la canción de Luz y ...........
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