Por casualidad cayó en mis manos y ya me advirtieron, al instante, de los peligros que su lectura podría entrañar. Lo cierto es que no se me olvidara la sensación de la primera lágrima deslizándose por mi mejilla. Tampoco se me olvidara ese estado de ansiedad que produce el querer llegar al final de la historia, ni la incredulidad de verme usando pañuelos de papel a medida que avanzaba el relato.Todo por culpa de dos tiernas historia de amor que se superponen en el tiempo.
El que escribe sabe que en ocasiones no es necesario moverse de la silla de su cocina para iniciar un emocionante viaje a lo más escondido se sus sentimientos y también sabe que es muy placentero compartir los sentimientos con los seres que te rodean.
1 comentario:
Un libro bellísimo, y muy recomendable.
Gracias por tus palabras en el blog.
Muchas gracias,
Un beso,guapo,
Marta
Publicar un comentario