En Roncesvalles

El que escribe cuando llega a Roncesvalles siente algo especial. Se encuentra con peregrinos de diversas nacionalidades y de diferente condición pero siempre con un espíritu admirable. Todos saben que les quedan muchos kilómetros para llegar a Santiago y todos saben que están a punto de iniciar un bonito viaje interior.

El que escribe se encontró con Sonía e Isabel, dos chicas de Burgos con un gran bagaje cicloturista. Estas dos chicas han recorrido media Europa a lomos de sus bicicletas. En Roncesvalles tuvimos el honor de compartir cervezas , desayuno y unos escasos kilómetros en su compañia. En esta ocasión nuestro camino tenia diferente dirección pero mi grupo tenía el mismo sentido del humor, la misma ilusión y las mismas ganas de conocer mundo que ellas.

Desde aquí les mandamos un fuerte abrazo a ellas y a todos los peregrinos que vagan por los caminos.