El que escribe, un año después, tiene el privilegio y la suerte de poder postearte otra foto de Rosita. Hace unos días pasé por delante de su casa y me alarme al no verla sentada en el porche de su casa. Cuando salió a saludarnos y a contar las mismas historias que me cuenta todos los años, sentí alegria, alegria por poder volver a verla y saber que despues de un año seguimos los dos en esta bonita tierra.
Esta tarde he llorado porque un amigo ha perdido a un ser querido.Se que mis lagrimas no servirán de nada pero me hizo sentirme bien acompañar en el llanto al bueno de Adolfo.
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